Si te lo dice un loco...

A quien corresponda:

Estimado(a) ___________, si un loco algún día te dice algo, cree en que es verdad, porque puede que tú seas el loco. Puesto que sólo piensas que tu realidad es cuerda, y que la gente con la que convives también lo es,
pero no te das cuenta que esta sociedad de locos puede no ser verdadera,
sino que es el fruto de la estúpidez y del orgullo, de la tristeza y el dolor que se tienen al gritar hacia los cielos preguntando:
―Padre, ¿me has abandonado?― y no recibir respuesta alguna, interpretando ese silencio como un gran―:
―Si, te abandoné.

Un fuerte tono entre notas y destellos apagados: es así como se ha desvelado la verdad, haciéndonos notar el hecho
de que somos humanos y debemos pagar por los pecados de nuestros padres, haciendo así, pagar a nuestros hijos por los nuestros; entrando en un ciclo sin fin.

Eso es algo que no debe, que no puede pasar más, es algo que tenemos que detener; desalineándonos del orden social,
para así poder crear algo nuevo, algo diferente, y que nos tomen como locos, creando sólo, pensando en no pensar,
para así no arrepentirnos de nuestros pecados, para liberarnos de la estricta opresión de lo ético y lo moral en nuestras vidas.
Ya que estos hechos son sólo delirios de la vida, delirios que uno tiene al pensar que algo es correcto,
haciendo mal uso de nuestra realidad y nuestro existir, pensando en que "amor" y "sexo" son cosas iguales,
que "tristeza" y "odio" son cosas distintas.

Por eso es bueno el pensar en no pensar, para no caer en la profunda vergüenza y desilusión que nos aqueja al darnos cuenta de que esas emociones son inversas,
que lo que pensamos que es distinto, realmente es igual y lo que pensamos como igual es distinto,
llegando así, a caer en algo en lo que cualquier ser humano puede caer:

La locura.

Espero que con estas líneas hayas reflexionado.

Atentamente:

Un Loco.

Un Niño

Erase una vez un niño muy alegre,


hijo del hombre más importante,

pero aun así, sólo un niño.



Él simpre parecía feliz junto a su padre,

pero realmente en su interior, nunca lo fue,

puesto que lo que él más deseaba, era volar,

volar como las aves, acercándose cada vez más al sol.



Pero él nunca tuvo la oportunidad,

siempre marginado por la sociedad

y nunca entre las aves se iba a encontrar.



Mas un día común salió a pasear al bosque,

y se fue a encontrar un hermoso lugar,

nada lo distraía, imaginaba volar,

pero se percató, de una pequeña avecilla a punto de desfallecer.



Se paró frente a ella y le preguntó

- ¿Amiga ave, qué te pasó?

El avecilla con un último aliento le contesto

- Ayúdame y de mí, lo que quieras obtendrás-



Al oir eso su cuerpo reaccionó,

y sin percatarse al avecilla ayudó,

a su casa la llevó y alli la curó, y al acabar le comentó

-Avecilla yo te ayudé, ahora el trato debes cumplir

en ese momento el ave se paró, y le contestó

-Lo prometido es deuda, pídeme lo que quieras



El niño emocionado gritó,

-Quiero tus alas, por favor!!!

el ave al oir eso se enfadó y le dijo:

-Mis alas no puedes tener, pide otra cosa y te la daré.



El niño lleno de rabia lloró,

y al avecilla de un golpe mató,

le cortó sus alas con desesperación

y con aguja e hilo a su espalda las cosió.



Entonces salió, sangrando y sufriendo,

a el edificio más alto se subió,

y con un poco de locura,

de el se lanzó.



Voló..., un segundo y calló,

consiguiendo así llegar,

al final de su vida.



La gente a su alrededor se empezó a reunir,

y con gran tristesa, a descanzar lo llevaron.



En el cementerio él terminó,

por un deseo que se cumplió

por eso lucha por tus sueños cada vez más,

pero cuida de no lastimarte jamás.